Capitulo 13: "En mi cuarto"

"Noche de miér….coles, exactamente las 23:49 pm.

¿Por que tanto entusiasmo en el tiempo?, es que no veo la hora de qué termine el día. Esta semana comenzó muy intrincada y todo parece que continuará así.

Con respecto a Gabriela y su borrachera, bueno, ninguna novedad, no quiere hablar conmigo (últimamente nunca habla conmigo), y con el padre ¡menos que menos!.

No se cuando la perdí.

Hasta los 13 tuvimos una relación perfecta, re-re compañeras, carne y uña, mi chiquita, mi bebé…. .

Pero desde que comenzó el secundario, ya no fue lo mismo, nuevos amigos, el chat, salir a bailar, la adolescencia la atrapó, y la alejó de mi.

¡Es verdad!, siempre, siempre intenté ser lo más alejado al modelo de madre que yo padecí.

No fui controladora, ni manipuladora, ni deposité mis frustraciones en ella, nada de eso.

Por eso estoy desconcertada.

No se que hacer, ¡¡16 años por Dios!!!.

A esa edad yo… bueno, era una flor de pelotuda yo!.

Vivía en las nubes.

Primero: creía en la posibilidad de existencia de extraterrestres, (pero como los de “V”, es decir: ¡lagartos!) también en la paz mundial, en los mensajes subliminales satánicos de los Pitufos, y me ¡copaba la vida! viendo “Hombres de Ley”, mientras soñaba con ser abogada como Federico Luppi , Rubén Stella o Norberto Díaz .

No me separan solo 23 años de mi hija, estoy a años luz, lo sé.

La nona siempre cuenta que teniendo ya 19 años, se escapaba por los fondos de su casa para ir a bailar con sus hermanos mayores, nunca se llevó bien con su madre, que a su vez, ¡a la tierna edad de 15 años!, la obligaron a casarse con un turco alcohólico y golpeador dueño de un almacén de ramos generales.

Mi madre, que fue criada con más libertad, disfrutó de los bailes en los clubes, las fiestas de carnaval y del Club del Clan desde que tenía 14 años, claro, era otra época, las chicas iban a bailar acompañadas de su mamá.

Ni siquiera yo tuve la suerte de mi vieja.

Por culpa de la maldita dictadura militar en los 70’, y el miedo generalizado que impregnó a la sociedad, mi vieja recién me dejó salir sola a bailar cuando terminé el secundario.

¡¡A los 18 años!!.

¡¡lLes relaté 4 generaciones de mujeres de mi familia, 3 de ellas con vidas más jodidas que la de mi hija y ninguna nos emborrachamos a los 16 años!!.

Esas eran cosa de varones.

Y nosotras fuimos señoritas.

Con mis problemas si, pero no existía la anorexia, ni las peleas, ni las drogas, ni nada parecido.

Al menos en mi mundo.

Pero eso fue hace 20 años.

Que no es nada, en la larga vida de un árbol. Pero demasiado tiempo para nosotros los humanos.

Y para humanos lagartos como yo, ni hablar.

Cuando yo tenía 16 años… ¡no me dejaban salir a ningún lado!. Por lo que mis horas transcurrían en mi habitación, con mis libros, mis revistas y los discos de mi hermano mayor.

Pensando cuando llegaría el día en que sería libre, libre como lo es hoy Gabi.

Pero me tenía que conformar soñando despierta.

Mientras escuchaba una y otra vez esta hermosa canción que con el tiempo perdí el disco, pero la reencontré en Internet.

Espero que les guste."