“Primera noche sola en casa.
Mario está triste, no es para menos.
Nos separamos.
Se comportó bastante racional, se va a quedar por el momento en el taller.
Le dije que no era necesario, podíamos arreglarnos de alguna manera, no se…
“Es mejor así, dejá. Si me quedo en casa va ser peor, me imagino que te dará asco dormir conmigo,”
“No Mario!, tampoco la pavada por favor!”
“Si claro…ja!, me río… sabes de que me río?, me acuerdo que antes te excitaba que me acueste mugriento del trabajo”
“Nunca me gustó Mario!, te lo decía siempre!, años me costó que te acostumbraras a bañarte después de cenar!”
“Si…bueno, como digas nena…¿te puedo decir nena no?”
“Si Mario”
“Bueno…hasta luego… Ja!, sabes de que me río?”
“No Mario…. ¿De que?”
“Veo el video de los 15 de Gabi y me pregunto si todo no era una mentira”
“Te estás pasando Mario!, que carajo decís?!”
“No, nada… disculpame, bueno… me voy, mmm, parece que va a llover esta noche, bueno, me voy, mmmm”
“Mario!!. Te vas! o te quedas!, decidíte!”
“Epa!!... ¿por que tanto apuro?, acaso…¿hay algo que debería saber?”
“Hace lo que quieras Mario!, pero te digo algo, no pareces un adulto.”
“Tenés razón mi vida, saludame a los chicos por mi, me llevo una foto de ellos en la billetera”
Finalmente a las dos horas! se fue.
Casi ni cenamos, los chicos estaban callados, yo tenía un nudo en el estómago.
Pero es mejor así.
Pobre Mario… encima llueve.”
viernes, 30 de octubre de 2009
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